La añada 2018 ha sido fresca y equilibrada
La Denominación de Origen Toro cierra la vendimia 2018 con 22.572.585 Kg de uva, tras una cosecha fresca pero muy equilibrada, en la que los racimos han entrado en las bodegas en un estado sanitario ‘inmejorable’.
En total, se han recogido 20.686.944 Kg de Tinta de Toro, 418.886 Kg de Garnacha, 842.055 Kg de Malvasía y 624.700 Kg de Verdejo, en las 5.624 Ha. en producción que alberga el marco de la Denominación de Origen.
La campaña se ha alargado desde el 10 de septiembre hasta el 27 de octubre, en la que han participado 1.024 viticultores y 60 bodegas. Como viene siendo habitual, debido a la gran cantidad de cepas viejas en vaso existentes en la zona, en torno al 80% de la recolección se ha efectuado de forma manual.
- Una cosecha complicada
Teniendo en cuenta que la pluviometría recibida desde el invierno pasado y primavera ha sido superior a las de otras campañas; que en mayo se registró una leve helada tardía y que el mes de julio fue atípico (con temperaturas no tan altas como se podrían esperar), la vendimia del 2018 ha presentado una calidad del fruto y un estado fitosanitario inmejorable.
Debido las condiciones climatológicas, la vendimia comenzó algo tardía y se han manifestado grandes diferencias de maduración en el conjunto de todo el territorio que engloba la Denominación de Origen. Por ese motivo, ha sido una vendimia más larga y secuenciada en su recolección, pero de grandes equilibrios en la acidez y alcohol de los vinos.
Las primeras percepciones de los vinos de esta añada es que gozan de una gran intensidad cromática, con acideces y PH moderados al tiempo que poseen una buena dotación alcohólica.
Los vinos son más frescos y menos estructurados que en su antecesora y atisban un gran potencial de guarda.