Hoy queremos tratar el tema de la conservación de las botellas de vino, un hándicap con el que nos topamos de una forma más o menos habitual.
Los expertos recomiendan guardarlos en cavas especialmente diseñadas para este fin o en la ‘bodega’ de casa. Lo que no tienen en cuenta son dos cosas: La primera es que las cavas tienen un precio elevado y la segunda es que no todo el mundo tiene en casa una ‘bodega’ o ‘merendero’.
También es frecuente escuchar a enólogos decir que “los vinos se beben demasiado pronto”. Seguimos con el mismo problema, si no tenemos un sitio adecuado para conservarlos, ¿qué hacemos con ellos? Si esperamos a comprarlos, es probable que algunas añadas ya no estén en el mercado.
Teniendo en cuenta las limitaciones de cualquier aficionado al vino, hemos pensado ofreceros algunas pautas para poder guardarlo en las mejores condiciones posibles.
- Es importante mantener una temperatura constante. Si el vino se guarda a 10ºC, que ésa siempre sea la temperatura (más o menos) y si es a 15ºC, también. Un sitio como la cocina, no es el espacio más adecuado ya que, cada vez que se cocina, la temperatura oscila. En la medida de lo posible, trataremos que la temperatura no suba de los 16ºC.
- Tener en cuenta que sea un espacio con ventilación. Tampoco es necesario abrir las ventanas de par en par, simplemente que haya un poquito de aire.
- Mantener las botellas en formato horizontal, pues el vino debe estar en contacto con el corcho. Los espumosos se pueden guardar en vertical.
- Aunque la mayoría de los vinos se presentan en botellas oscuras, es necesario evitar la luz del sol directa para que no se produzcan re-fermentaciones dentro de la botella.
- ¿Qué hago con el vino si no me acabo la botella? ¡Llama a tu vecino y termínala! El vino es más que una bebida, es un momento, una conversación…. Disfrútalo. No obstante, el vino de Toro suele ‘durar’ abierto algunos días, así que ya no tienes excusa.
Los más fans de este preciado manjar pueden preguntar si en su zona existe alguna vinoteca donde ofrezcan el servicio de cava o ‘guardería de botellas’. Es decir, por un determinado importe se alquila un espacio donde poder conservar las botellas de vino en unas condiciones perfectas, algunos sitios incluso disponen de una sala donde poder degustarlos.